Blim no tiene un catálogo importante o que me llame la atención, eso lo comprobé cuando por curiosidad activé el mes de prueba, que no duró ni 10 minutos, porque cancelé inmediatamente desde su página.
VER: Blim, ¿por qué no es lo que México esperaba?
Como Izzi, servicio que tengo contratado desde que era Cablevisión, ofrecía el servicio con pago a la misma cuenta me pareció buena idea para poder revisar su catálogo, no esperaba que me gustara, pero un mes gratis sonaba bien.
Di una revisión en forma y la verdad no me pareció que tuviera un catálogo decente y de inmediato di en cancelar, me llegó la notificación y como en Netflix te dicen que esperan que regreses pronto.
En ningún momento te informa Blim que debes hablar a Izzi y cancelar, vaya, si estás contratando desde su plataforma, ¿cuál es la lógica de informar a Izzi?.
Bueno, como no vi ni un sólo contenido de Blim y al haber cancelado no abrí de nuevo este servicio, resulta que Izzi no lo canceló y me cobraron los 89 pesos de la promoción.
La cantidad es lo de menos, ni más pobre ni más rico por menos de 100 pesos, es la manera en que se manejan este tipo de servicios.
Resulta que hablo a Izzi para quejarme sobre el cobro y me explicó el tipo que me contestó que debí haber informado a ellos sobre la cancelación, y yo le dije que no tenía lógica, puesto que no había activado el servicio con ellos.
Además el tipo confirmó que cuando lo activé, a ellos les llegó una notificación con la fecha de inicio del mes de prueba; entonces, pregunté, ¿por qué no les llegó lo de la cancelación?.
Total que al haberme facturado el siguiente mes, debo pagarlo, y para mi desgracia, como no me di cuenta ya facturó un mes más, que aún no me cobran, pero que me cobrarán a fin de mes.
Quedó cancelado, y pregunté si debía avisar a Blim, y la respuesta fue: «no, ya quedó cancelado con nosotros y no es necesario».
Fin de la historia, son tan sólo 178 pesos, que no, no es mucho, pero que no debo pagar porque yo cancelé inmediatamente. Pero al final mi culpa por activar un servicio que no iba a usar.